El Gobierno Vasco ha puesto en marcha hoy un Plan Renove para incentivar la compra de vehículos nuevos a cambio de retirar de la circulación los modelos de más de 10 años.
La novedad respecto al año pasado es que la ayuda baja a mil euros por vehículo, en lugar de los dos mil del año pasado, para lograr duplicar los coches achatarrados con el mismo presupuesto.
El resto de las condiciones son similares a las del plan del año pasado: se mantiene la neutralidad tecnológica, es decir, habrá ayudas para todas las tecnologías de motor, sean eléctricos, híbridos, de hidrógeno, gas natural, de gasolina y diésel, aunque con cuantías diferentes.
La máxima ayuda de tres mil euros, será para los eléctricos puros y los de hidrógeno, ambos escasos en el mercado. Para los más habituales de diésel y gasolina, será de mil euros.
Los vehículos que se compren deberán costar menos de 25.000 euros en los coches, menos de 40.000 los eléctricos y sin límite para furgonetas.