Cuatro familias, acompañadas por miembros de Stop Desahucios, se concentraron este lunes en Donostia para solicitar ayuda al Ayuntamiento ante la posibilidad de ser desahuciadas de las viviendas vendidas por Inmobiliaria Vascongada al fondo buitre Azora.
Asimismo, registraron un escrito en el consistorio dirigido a todos los grupos en el que abogan por buscar una solución para no ser desalojados de esas viviendas cuando venza su contrato. Ya se les ha comunicado, por medio de burofax, que el 28 de febrero sus contratos vencerán “a todos los efectos”, y que de forma verbal les han asegurado que, de momento, les irán renovando mes a mes.
El alcalde, Eneko Goia, se volverá a reunir de nuevo el próximo viernes con los afectados.