Un hombre de 23 años ha ingresado en prisión tras incumplir en repetidas ocasiones las normas de confinamiento en Errenteria. El joven fue detenido el miércoles por un delito de desobediencia, tras ser sorprendido un total de trece veces desde el pasado día 18 de marzo.
Sobre las ocho y cuarto de la mañana, una patrulla de la Ertzaintza, que realizaba labores de protección ciudadana por la citada localidad, localizaba en la calle Navarra a un varón que, preguntado por la razón de su presencia en la calle, contraviniendo las normas de confinamiento del vigente Estado de Alarma, no acertaba a dar un motivo convincente. Ante esta respuesta, los agentes le conminaban a que se dirigiera a su domicilio so pena de ser detenido por un delito de desobediencia.
Más tarde, pasadas las diez y veinte de la mañana, otra patrulla de la Ertzaintza era requerida para personarse en un comercio de la calle Donostia de la misma localidad, ya que un individuo había pedido un producto a la dependienta y, tras recibirlo, había salido corriendo del local sin abonarlo. Tras hablar con la responsable de la tienda, que les facilitaba una descripción del sospechoso, los agentes determinaban que podía tratarse del mismo individuo que había sido apercibido previamente, por lo que realizaban un recorrido intentando localizarlo.
Así, pasadas las diez y media lo localizaban en la Avenida Galtzaraborda. En su poder, los agentes encontraban el producto sustraído en el comercio, de manera que procedían a su detención bajo la acusación de un delito de desobediencia, por el incumplimiento de las normas de confinamiento propias del Estado de Alarma, y le imputaban un delito de hurto.
Puesto a disposición judicial, el juez decretaba su inmediato ingreso en prisión por el reiterado incumplimiento de las normas de confinamiento establecidas en el Real Decreto por el que se establece el Estado de Alarma, ya que el sospechoso había sido sorprendido en un total de 13 ocasiones, desde el pasado 18 de marzo, contraviniendo las citadas normas, tanto por la Ertzaintza como por la Policía Local de Errenteria.