La estima provisional de biomasa de anchoa en el golfo de Bizkaia se sitúa este año en torno a 330.000 toneladas, la cifra más alta de la serie histórica, iniciada en 1987. Estos resultados se encuentran muy por encima de las 21.000 toneladas, que marcan el valor mínimo recomendable para garantizar la sostenibilidad de la especie.
Con relación a los datos de la costera de la anchoa de este año, las capturas de los buques vascos han sido de 4.600 toneladas frente a las 8.500 toneladas de 2019, que se explica por la duración más corta de la campaña debido a la incidencia de la Covid-19 (este año los barcos han faenado durante un mes y medio, frente a los dos meses y medio habituales de campañas anteriores). Respecto al precio medio en lonja, también ha sido algo inferior: 1,38 €/kg frente a los 1,62 €/kg del pasado año.
Por otro lado, una de las conclusiones obtenidas a través de las diferentes campañas de los últimos años es que el tamaño por edad de la anchoa está disminuyendo. Esta disminución podría ser debida a una combinación de factores, por un lado, los fuertes reclutamientos hacen que la mayoría de la población sea de un año de edad, por otro lado, las condiciones favorables a una alta abundancia hacen que sobrevivan anchoas de menor tamaño para la misma edad, y finalmente, también sabemos que el aumento de temperaturas da como resultado individuos de menor tamaño.