Beatriz Artolazabal, consejera de Igualdad del Gobierno Vasco ha señalado hoy que “vamos a hacer lo posible y casi hasta lo imposible para conseguir el objetivo de no dejar a nadie atrás”. Lo ha hecho durante el acto inaugural de la jornada de EDEKA, la coordinadora vasca de representantes de personas con discapacidad, que ha abordado este año el ‘Impacto de la pandemia del coronavirus en los derechos de las personas con discapacidad’.
La consejera, quién ha inaugurado la jornada de forma telemática junto a Aitor Bedialauneta, presidente de EDEKA, ha indicado que “en su dimensión sanitaria el virus afecta a toda la ciudadanía; pero en su dimensión social, el efecto es tan desigual como la propia sociedad”, destacando que “llueve sobre mojado, por lo que debemos poner especial atención a la situación que afrontan las personas con mayores dificultades”.
“También tenemos que seguir atendiendo otras problemáticas que estaban ahí y que siguen estando ahí. Y que no dejan de ser importantes”, ha dicho. “Hay que atender, lo urgente y lo importante”. Así, ha puesto en valor el ‘Plan de Vida Independiente’, ya que “con los apoyos necesarios, se puede apostar por una vida independiente en el propio domicilio de cada persona”.
