El Ayuntamiento de Irun acogía el pasado día 12 de marzo la Comisión de Coordinación de la Ertzaintza y Policía Local de los ayuntamientos de Irun y Hondarribia. Esta reunión hacía la número 28 de este tipo de encuentros de coordinación entre las distintas instituciones, donde en este caso se abordó el balance y análisis de los hechos delictivos correspondientes al año 2020
En la reunión estuvieron presentes los alcaldes de Irun y Hondarribia, responsables de la Ertzaintza a nivel territorial, así como los responsables de la Ertzain-etxea de Irun y responsables de las policías locales de ambos municipios para analizar la evolución de los datos en materia de seguridad.
Las infracciones penales descendieron el año 2020 en un 5,44% en Irun y un 16,97% en Hondarribia en relación a los datos registrados el año anterior. En la ciudad de Irun pasaron de las 2.980 infracciones penales de las que se tienen constancia en 2019 a las 2.818 producidas en 2020 en Irun. En Hondarribia esas cifras son 725 infracciones penales cometidas en el año 2019 descendiendo a 602 en el año 2020.
Los datos aportados indican que, el año pasado, descendieron prácticamente todas las modalidades delictivas en los dos municipios, fundamentalmente los Delitos Contra el Patrimonio y los Delitos Contra las Personas.
Los datos aportados por las tres policias que aúnan las demarcaciones de los dos municipios indican que:
- Delitos Contra las Personas: En lo que se refiere a las tipologías que se encuadran en este apartado, observamos que las infracciones que habitualmente se producen en los domicilios, como es el caso de la Violencia de Género y la Violencia Doméstica indica un descenso de 223 casos en 2019 a los 190 registrados en 2020 en los dos municipios de la comarca del Bidasoa.
Los Delitos contra la libertad sexual han experimentado un descenso de 31 casos del 2019 a los 27 del 2020.
- Delitos Contra el Patrimonio: Los Robos con Violencia y/o Intimidación han disminuido en Irun de 61 en 2019 a los 36 del 2020, es decir un descenso del 40,98%. En Hondarribia hubo un descenso de 6 a 5 en la citada tipología delictiva.
Los Robos en domicilios también registran un descenso del 24,69% en Irun, al bajar de 81 a 61 casos en la comparativa de los dos últimos años. En Hondarribia también se registró una bajada de 19 a 16 casos denunciados, un 15,79% menos.
Otro decremento notable fue el de los hurtos en el año 2020, al bajar un 44,09% en Irun, de 1007 a 563 casos; y un 48,31% en Hondarribia, registrándose 178 casos en 2019 frente a los 92 del año pasado.
La única excepción en la comarca del Bidasoa, igual que ha ocurrido en general en Euskadi y en todas las estadísticas policiales, debido a las características específicas del estado de alarma y al incremento importante de las operaciones y compras online, se produjo una subida muy sustancial de los delitos de estafa al pasar de 300 denuncias recogidas en 2019 en las dependencias policiales a las 757 del año 2020.
- Delitos Contra la Salud Pública (Tráfico de Drogas,etc.): En la ciudad de Irun, se pudo constantar un descenso de 37 a 24 infracciones penales en este capítulo del tráfico de estupefacientes.
Como es lógico en un año 2020 marcado por las restricciones y la limitación del ocio nocturno, también descienden los delitos relacionados con la conducción bajo la influencia del alcohol, drogas, etc. Descendieron un 21,69 % en Irun y un 30,95% en la localidad de Hondarribia.
En el ámbito de las infracciones administrativas se aportaron los siguientes datos, que no hacen más que trasladar las acciones de los tres cuerpos policiales en la situación excepcional que se está viviendo debido al COVID-19. Las infracciones contra la Ley de Seguridad Ciudadana pasaron de las 490 del año 2019 a las 1776 del año 2020 (incluyen la desobediencia y los incumplimientos contra la normativa sanitaria vigente).
Estrategia conjunta, prevención, coordinación, información y análisis
La estrategia de la Ertzaintza y las Policías Locales se mantiene en seguir reforzando el trabajo de patrullas, tanto en coche como a pie, en los municipios para incrementar la percepción de seguridad en la ciudadanía y atender a las necesidades de las y los vecinos en materia de seguridad, así como realizar un mejor aprovechamiento de los recursos humanos y materiales.
Durante el año 2020 ha sido especialmente necesaria la coordinación y adaptación de los tres cuerpos policiales a las nuevas situaciones planteadas por la pandemia, donde se han multiplicado las labores de asistencia y ayuda a la población, además de interiorizar y velar por el cumplimiento de una normativa sanitaria en constante cambio y evolución.