- Beatriz Artolazabal, consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, expone la “hoja de ruta” del plan ante más de medio centenar de personas relacionadas con la vida política, social y periodística, así como con asociaciones de víctimas del terrorismo y organizaciones de paz
- Federico Mayor Zaragoza, presidente de la Fundación Cultura de Paz, participa en la presentación con su análisis particular del texto del Ejecutivo vasco
- Jose Antonio Rodríguez Ranz y Monika Hernando, viceconsejero y directora de Derechos Humanos, Memoria y Cooperación, acompañan a la consejera
- “Finalizada la actividad terrorista, disuelta ETA, queremos ser un referente en convivencia, derechos humanos y diversidad”, ha dicho Artolazabal
Madrid, 06/10/2021
El Plan de Convivencia, Derechos Humanos y Diversidad – Udaberri 2024 se ha presentado esta tarde en Madrid ante más de medio centenar de personas relacionadas con el ámbito político (Congreso y Senado), periodístico, cultural y social, así como representantes de diferentes asociaciones de víctimas del terrorismo y organizaciones e institutos de paz.
“Hoy, en este 2021, finalizada la actividad terrorista, disuelta ETA, queremos ser referente en convivencia, derechos humanos y diversidad. Primavera (en alusión al significado de Udaberri) es luz, color, alegría, naturaleza… Es el renacer de la vida. Y en Euskadi nos merecemos una primavera, una primavera de plenitud”.
Con estas palabras, la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, ha comenzado su intervención para presentar un documento que supone “un compromiso con una hoja de ruta clara y definida”. En este sentido, la consejera del Gobierno Vasco ha explicado que el documento no es sino una muestra de “optimismo y visión positiva de la realidad y del futuro de la sociedad vasca”.
Artolazabal ha acudido a la capital española acompañada por el viceconsejero de Derechos Humano, Memoria y Cooperación, Jose Antonio Rodríguez Ranz, así como por la directora del área, Monika Hernando. Ambos han presentado algunos de los proyectos que ya están en marcha y que se enmarcan en Udaberri 2024.
Antes de su intervención, ha tomado la palabra Federico Mayor Zaragoza, quien fuera director general de la UNESCO y hoy preside la Fundación Cultural de Paz, para realizar su análisis del contenido del plan vasco.
Autocrítica y reconocimiento
Durante su alocución, la consejera Beatriz Artolazabal ha reiterado el compromiso del Gobierno Vasco en la defensa de los derechos humanos, del pluralismo político y de la diversidad “como bases de nuestro modelo de convivencia”, “sin dejar a nadie atrás”.
Artolazabal ha explicado que Udaberri 2024 se articula sobre tres agendas: la Agenda Vasca para la Convivencia; la Agenda Global de los Derechos Humanos y la Agenda Vasca para la Diversidad. Estas agendas se desarrollan, según ha explicado, en 16 líneas de acción y 70 acciones. “Cada una de las tres agendas tiene identidad propia, aunque es la interacción entre las tres la que dota al plan de su verdadero significado, coherencia y alcance”.
En este compromiso, la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales ha dicho que “caminamos en la buena dirección”, al tiempo que ha reconocido que “nos quedan todavía asignaturas pendientes y en curso; retos que afrontar, cuya superación nos va a exigir, a todos y a todas, una actitud proactiva”.
Artolazabal ha asegurado que “durante cinco décadas, ETA ha supuesto la principal y más grave vulneración de los derechos humanos y el más directo atentado a las libertades de Euskadi” y ha hablado de “un nuevo tiempo” en el que “inexcusablemente” ETA y su universo político deben hacer autocrítica, “asumiendo responsabilidades y reconociendo el daño causado”.
Entre las asignaturas pendientes, la consejera ha tenido palabras de recuerdo y homenaje para las 854 víctimas mortales de ETA y “para las miles y miles de personas heridas, secuestradas, amenazadas, coaccionadas o extorsionadas”.
“Las víctimas nos han dado un enorme ejemplo de resiliencia y generosidad. Su derecho a la memoria, la verdad y la justicia se torna en deber para nosotros y nosotras; un deber que, reconozco, no siempre hemos cumplido diligentemente”, ha explicado Artolazabal, quien también ha hablado de que “hoy las víctimas encuentran en la sociedad vasca la solidaridad, el calor y el reconocimiento debidos”.
La política penitenciaria vasca, recién asumida la gestión de los centros ubicados en Euskadi, y su apuesta por la Justicia Restaurativa es otro de los temas tratados en el Plan Vasco de Convivencia; así como la defensa de la diversidad en cualquiera de sus facetas, ya sea política, social, sexual o racial.
Beatriz Artolazabal ha concluido su intervención haciendo un alegato de la diversidad como seña de identidad del siglo XXI. Optar por la diversidad exige políticas específicas para evitar discriminaciones; “porque tristemente en nuestra sociedad hay todavía hoy factores y colectivos que sufren una discriminación propia y específica, especialmente por razón de orientación sexual u origen étnico”, ha dicho, citando expresamente a los colectivos LGTBI y gitano. Por ello ha defendido la “gestión positiva” como inspiración de las políticas públicas.