El juzgado que instruye el caso del masajista donostiarra investigado por presuntos abusos sexuales a tres chicas menores de edad ha decidido mantener en libertad provisional al procesado, al que le ha impuesto una fianza de 9000 euros para asegurar su eventual responsabilidad civil.
La detención del acusado se llevó a cabo el pasado miércoles por la noche en la capital guipuzcoana, tras recibir la denuncia de una mujer que había contratado un servicio de masaje y, según su versión, el masajista se habría extralimitado en su actuación tocando sus partes íntimas.
Según recoge el auto de procesamiento, los hechos se habrían iniciado en febrero de 2020, cuando el investigado habría conocido a las tres adolescentes, de 15, 13 y 14 años, a las que «se habría ofrecido» para hacerles masajes con el fin de «quitarles las tensiones, la ansiedad y el estrés que pudieran tener». Posteriormente, tras ganarse la confianza de las menores, presuntamente les refirió que para que los masajes resultaran «realmente efectivos» era «necesario» que les «masajeara» en sus zonas sexuales.
El documento judicial considera que estos hechos podrían ser indiciariamente constitutivos de un delito contra la libertad sexual debido a los «indicios racionales de criminalidad» existentes en el caso, derivados de «las exploraciones en prueba preconstituida de las víctimas» y los informes del equipo psicosocial, así como de la declaración del propio imputado y de sus conversaciones con las menores a través de las redes sociales.
Por su parte, el acusado ha presentado recurso contra el auto solicitando que se culminen las diligencias de investigación aún pendientes en la fase de instrucción y se proceda al sobreseimiento de la causa.