El programa Hazinnova proporciona ayuda a pequeñas empresas que quieran aplicar pequeñas innovaciones de las que se puedan apreciar los resultados en apenas tres meses. Es el caso de Metalúrgica de Bengoetxe, una empresa de Galdakao que acudió a él para unificar su actividad en un único taller.
Por si la irrupción de las nuevas tecnologías y su inagotable potencial no lo hubiesen dejado suficientemente claro, en los dos últimos años la pandemia, la crisis logística y la inflación han terminado de subrayar la necesidad que las empresas tienen de ser más eficientes en todos y cada uno de sus procesos y departamentos. Deben repensarse. Deben examinarse y ver dónde y cómo pueden mejorar para garantizar su competitividad. Dicho de otro modo, toca innovar.
Para hacer posible que tanto las pymes como las micropymes puedan incorporar la innovación a su actividad, el Gobierno Vasco puso en marcha en 2019 el programa Hazinnova, que brinda a las firmas con más de cinco trabajadores la oportunidad de contar con cincuenta horas asesoramiento gratuito para poner en marcha pequeños proyectos. El programa está expresamente pensado para iniciativas que puedan mostrar resultados tangibles en las áreas de fabricación, logística, comercialización o administración y finanzas en tan solo tres meses, algo posible gracias a la colaboración en cada caso de una consultora y un agente con experiencia en el sector y mercado en el que la firma participante desarrolla su actividad.
Uno de los casos de éxito que han protagonizado las 437 empresas que ya han participado en él es el de Metalúrgica de Bengoetxe, que lleva ya cuatro décadas dedicándose a la fabricación de piezas y maquinaria de hierro, acero y ferroaleaciones. La compañía, actualmente integrada en Bolueta Engineering Group, cuenta con 25 trabajadores y reparte su actividad en varios talleres en Galdakao. Y fue ahí, en esa poco práctica disposición, donde encontró una posible mejora.
En concreto, se fijó en los dos talleres separados por una carretera que acogían la fabricación de mandrinos e hileras y se propuso prescindir de uno de ellos y, con él, del tiempo y esfuerzo malgastados en los hasta entonces necesarios desplazamientos de material entre una y otra nave. El enunciado es sencillo pero la práctica ya es otro cantar.
Para que el traslado y concentración de la actividad resultara exitosa había que realizar una cuidadosa reestructuración de la planta que iba a acoger toda la producción. Había que estudiar cómo aprovechar al máximo el espacio disponible haciendo que en él el flujo de los procesos se sucediera con naturalidad de modo que los trabajadores pudieran realizar su tarea con la mayor eficiencia, comodidad y seguridad posibles. Es decir, todos los elementos y espacios comunes que componen la planta (máquinas, estaciones de trabajo, áreas de almacenamiento, pasillos…) debían componer un perfecto engranaje que, además, diera opción a la futura incorporación de nuevos procesos o equipamientos.
Dentro del programa Hazinnova, Metalúrgica de Bengoetxe pudo presentar su proyecto de reestructuración a LKS, consultora externa que tras analizar todos los procesos de producción y posibles necesidades, introdujo una serie de importantes mejoras en la propuesta inicial. Para ello, los expertos analizaron aspectos como la distribución de la planta, el flujo de materiales, el proceso de producción de las piezas o las ventas de los últimos ejercicios, así como las previsiones inmediatas para, junto a los responsables de la empresa, definir sus necesidades futuras. Después, en colaboración con el agente Hazinnova (en este caso, la Federación Vizcaína de Empresas del Metal, FVEM), definieron el plan de implantación que, tal y como estaba previsto, ha permitido optimizar el funcionamiento de la planta.
Hazinnova es un programa del Gobierno Vasco que gestionan el Grupo Spri y la Agencia Vasca de la Innovación, Innobasque. El plazo para presentar propuestas a la tercera edición está abierto hasta el 1 de diciembre.c