El Gobierno Vasco, tras el cambio aprobado hace un año en la ley de juego en España, ha endurecido las condiciones del juego limitando el número máximo de locales de apuestas, bingos y casinos. Este hecho ha supuesto el cierre de 39 salones de juego.
A partir de este cambio, el gobierno es también más estricto en los requisitos de acceso, con el fin de ajustar la oferta del juego en Euskadi a lo que se considera “tolerable socialmente”. De este modo, esta normativa se ha aplicado para garantizar la protección de la salud y proteger a menores y colectivos vulnerables.
Las medidas adoptadas han sido una mayor distancia entre locales y un menor número de establecimientos. La distancia mínima obligatoria entre cualquier local de juego es de 500 metros radiales. Además, no puede haber locales de juego o apuestas a menos de 150 metros de los centros educativos reglados.
En cuanto al número de locales, en Euskadi solo puede haber 1 hipódromo, 14 bingos, 60 locales de apuestas y 170 salones de juego.
Junto a estas limitaciones, el Departamento de Seguridad ya no otorga nuevos permisos de explotación de máquinas para hostelería y salones de juego. Además, los establecimientos tienen un plazo de 7 meses para poder adaptarse física y técnicamente. Los locales deberán tener sistemas informáticos que estén conectados al registro de personas auto prohibidas al juego del Gobierno Vasco.
De este modo, los locales deben prohibir el acceso a menores, a personas que, de forma voluntaria, decidan prohibirse el acceso y a personas con alguna problemática con el juego que estén inscritas en el Registro de Interdicciones al Juego
La afición por los juegos de azar se ha expandido notoriamente
Según el Observatorio Vasco del Juego el 70,5% de la población juega o apuesta por lo menos una vez al año. Tras la pandemia, el juego online se disparó y en 2021 su GGR fue de 815,30 millones de euros siendo jugadores activos 1470.303.
Para acceder a casinos online fiables es imprescindible que el sitio web cumpla con una serie de requisitos que garanticen al usuario un juego seguro y libre de fraudes. Por ello, el casino online al que se acceda debe ser avalado por la DGOJ (Dirección General de Ordenación del Juego) contando con una licencia oficial. Junto a esta cuestión, también hay que tener en cuenta los medios de pago de los que dispongan: tienen que ser reconocidos y seguros.
También es obligatorio que la cuenta de los usuarios esté verificada y, además, que el casino no presente bonos de bienvenida; se aprobó hace un año un decreto que prohibía los bonos para nuevos jugadores.
