El Gobierno Vasco ha puesto en marcha dos nuevos servicios de atención y apoyo a las familias cuidadoras dentro de su apuesta “por un nuevo modelo de cuidados que acompañe a las familias en esta loable pero tan exigente labor”, según ha explicado la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal. Un enfoque, ha manifestado, que reconozca, reduzca y redistribuya la responsabilidad de los cuidados.
Por un lado, ZAINTEL es un teléfono, profesional y gratuito, en el que las familias cuidadoras podrán encontrar el apoyo que necesiten, ya sea información, orientación o consejo. Quienes precisen ayuda, podrán llamar al 900 100 356 y recibirán atención tanto en euskera como en castellano. En palabras de Artolazabal, este nuevo servicio brindará “una atención personalizada, accesible, inmediata, gratuita, profesional, confidencial y de calidad; además de convertirse en un espacio de escucha, desahogo, acompañamiento y apoyo emocional a las personas cuidadoras”.
Por otro, el segundo de los servicios presentados es Etxean Zaindu, de cuyo desarrollo se hará cargo ASCUDEAN, la Asociación de Familias Cuidadoras y Personas Dependientes. Etxean Zaindu se integra en el programa Laguntzabide, en vigor desde 2011, que atiende de forma integral a familias cuidadoras y a las personas en situación de dependencia, en los ámbitos del empleo, de la inserción e intermediación laboral de profesionales y de personas en riesgo de exclusión social o perceptoras de rentas de garantía de ingresos o de la formación.
Beatriz Artolazabal ha recordado que la Estrategia sociosanitaria de apoyo a las familias cuidadoras busca garantizar “que las personas que lo deseen puedan seguir residiendo en su domicilio el máximo tiempo posible. Y que las personas que deseen cuidar de forma personal a sus familiares puedan hacerlo en las mejores condiciones posibles”. En este sentido, el documento recoge diversas acciones encaminadas a desplegar un sistema de apoyo a las familias cuidadoras que “asegure el acceso universal a servicios de apoyo y respiro; un plan de cuidados que contemple una combinación de cuidado institucional y familiar adaptada a cada caso; que mejore la atención social y sanitaria a las familias cuidadoras y que prevenga, detecte y aborde situaciones inadecuadas de cuidado y/o sobrecarga”.