La Policía Local de Barakaldo detuvo este fin de semana a dos hombres por sendos delitos contra la seguridad vial. Según ha informado el concejal de Seguridad Ciudadana y Protección Civil, Ángel Madrazo, ambos conductores triplicaban la tasa de alcohol permitida y en uno de los casos no solo carecía de permiso de conducción, sino que pesaba sobre él una orden de detención emitida por el Juzgado de lo Penal nº1 de Barakaldo.
El primero de los arrestos se produjo hacia las 2.30 horas del domingo. Agentes de la Policía Local localizaron en una calle peatonal un vehículo con las luces encendidas y las puertas abiertas, y observaron a un varón tratando de repararlo. Se acercaron a esta persona para prestarle ayuda, quien manifestó que las puertas no ajustaban al cerrar y que tenía el faldón delantero por debajo del parachoques desencajado, por lo que estaba tratando de solucionarlo. El hombre desprendía un fuerte olor a alcohol, por lo que fue conminado a no conducir el coche.
Sin embargo, poco después los policías vieron al citado varón conduciendo el turismo, por lo que procedieron a interceptarlo y le practicaron la prueba de alcoholemia, donde arrojó 0,75 y 0,79 mg/l. Fue inmediatamente arrestado.
Posteriormente, hacia las 6.50 horas, una patrulla observó cómo un varón conducía un vehículo sin hacer uso del alumbrado obligatorio y sin señalizar las maniobras. Cuando iniciaron un seguimiento al citado coche, el hombre realizó un cambio de carril no advertido y obligó a los agentes a frenar bruscamente y cambiar la dirección para evitar una colisión. En esos momentos, los policías activaron las señales luminosas y acústicas del vehículo policial para instar al conductor a detenerse, pero éste hizo caso omiso y siguió circulando hasta que fue bloqueado por los agentes en una rotonda.
Los agentes se percataron entonces de que el hombre presentaba serias dificultades para entender las instrucciones, si bien admitió no disponer de permiso de conducción. Al identificar su identidad, además, la Policía Local comprobó que sobre el varón pesaba una orden de detención del Juzgado de lo Penal nº1 de Barakaldo, por lo que fue puesto a disposición judicial.
Ángel Madrazo ha recordado que el consumo de alcohol es uno de los factores de riesgo más frecuentemente implicados en los accidentes de tráfico. «Un conductor ebrio puede ocasionar unas graves consecuencias para el resto de personas, conductores o viandantes», ha advertido.