El Nolotil (metamizol) es el medicamento de marca más vendido en España y en estos momentos se encuentra en el punto de mira por la demanda interpuesta por la Asociación de Afectados por Fármacos (ADAF) para exigir su retirada del mercado y una compensación para aquellas las personas que han sufrido efectos adversos por tomarlo.
Los denunciantes alegan que este fármaco causa graves efectos secundarios y recuerdan que ya ha sido prohibido en Francia, Suecia, Dinamarca, Reino Unido, Irlanda, Estados Unidos, Canadá y Australia, entre otros países.
Efectos secundarios
El metamizol tiene una larga lista de posibles efectos secundarios, al igual que todos los medicamentos. El más frecuente es la hipotensión o disminución de la presión arterial, una reacción leve que afecta al 10% de sus usuarios. No obstante, el efecto adverso grave que más preocupa es la agranulocitosis, una caída brusca de las defensas que puede ser mortal. Al parecer, los anglosajones tienen una predisposición genética a este efecto secundario, lo cual ha causado varias muertes y, en consecuencia, se ha prohibido la venta de este medicamento en su país.
¿Por qué se sigue vendiendo Nolotil en España?
Tras ser sometido a una evaluación periódica denominada balance riesgo-beneficio, el Nolotil recibe la autorización de la Agencia Española del Medicamento y Productos Farmacéuticos (AEMPS), que tiene aprobado su uso para “el tratamiento del dolor agudo moderado o intenso post-operatorio o post-traumático, de tipo cólico o de origen tumoral” y también para hacer frente a la “fiebre alta que no responda a otras medidas o medicamentos para la fiebre”.
Cabe destacar que la AEMPS recomienda utilizar metamizol “solo para tratamientos de corta duración, siete días como máximo” y que, en caso de “ser necesario un tratamiento más prolongado, realizar controles hematológicos periódicos” para vigilar los niveles de glóbulos blancos.
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