En el conjunto de la capital vizcaína el porcentaje de renta que se destina a hacer frente al pago de la hipoteca o del alquiler de la vivienda, además de los gastos y suministros básicos, es superior a dicho 30%
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Bilbao ha elevado al Departamento de Vivienda y Agenda Urbana del Gobierno Vasco la solicitud de declaración de zona residencial tensionada al conjunto de la ciudad, después de analizar el diagnóstico realizado sobre el impacto del coste de la vivienda en las rentas de la población de Bilbao.
Para declarar zona tensionada es necesario que se cumpla al menos uno de los dos criterios que establece la Ley 12/2023 por el derecho a la vivienda. El primero es que la carga media del coste de la hipoteca o del alquiler en el presupuesto personal o de la unidad de convivencia, más los gastos y suministros básicos, supere el 30% de los ingresos medios o de la renta media de los hogares. El segundo indica que los precios de la vivienda en la zona en cuestión hayan crecido un 3% más que el IPC registrado en la Comunidad Autónoma de referencia en los cinco años anteriores.
En Bilbao se cumple el primero de los dos criterios. En el conjunto del municipio, la carga media del coste de la hipoteca o del alquiler en el presupuesto personal o de la unidad de convivencia, más los gastos y suministros básicos, supera el 30%.
El escenario que dibuja el diagnóstico muestra que las condiciones del mercado actual en el municipio generan dificultades a las unidades familiares para acceder a una vivienda. Estas dificultades tienen su origen en una variedad de factores entre los que destacan los altos precios de los alquileres o la baja disponibilidad de viviendas vacías.
PROCESO A SEGUIR PARA LA APROBACIÓN DEFINITIVA DE LA DECLARACIÓN DE ZONA TENSIONADA
Tras este primer paso, una vez definido el contenido del expediente, el Departamento de Vivienda y Agenda Urbana del Gobierno Vasco deberá dictar una orden de incoación del procedimiento que se hará pública en Boletín Oficial del País Vasco.
A partir de ese momento habrá 20 días hábiles para la presentación de alegaciones, que serán valoradas para proceder a la resolución que permitirá la aprobación definitiva de declaración de Bilbao como zona residencial tensionada. El último tramité será el traslado de esta decisión al Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana para su publicación en el BOE.
PLAN DE ACCIÓN PARA CORREGIR LOS DESEQUILIBRIOS EN EL MERCADO DE LA VIVIENDA
La solicitud para que se declare Bilbao como zona residencial tensionada se acompaña de un plan de acción específico que dará respuesta a las principales necesidades y desafíos identificados.
Se trata de un conjunto de 40 acciones articuladas en 5 ejes estratégicos que han sido creadas para corregir los desequilibrios detectados en el diagnóstico, con el propósito final de mejorar el acceso a la vivienda de la población de Bilbao, tratando de garantizar el Derecho Subjetivo a la Vivienda.
Así, este Plan de Acción, recoge acciones para el próximo trienio 2025-2028, con actuaciones en torno a estos cinco ejes estratégicos:
Impulsar un sistema de gobernanza y coordinación institucional entre el Ayuntamiento de Bilbao, Gobierno Vasco y Diputación Foral de Bizkaia, así como otros organismos y servicios -Alokabide y Etxebide-, para el seguimiento de las 40 acciones contenidas en el referido Plan de Acción.
Fomentar el alquiler asequible creando más vivienda pública y movilizando la vivienda vacía.
Actuar sobre el parque de edificios residenciales y regeneración urbana para alcanzar una mejora sustancial dentro del parque de viviendas, que amplie el número de las existentes en el mercado, mejorando la calidad del parque actual, evitando los desequilibrios existentes en la oferta de vivienda y sus precios.
Desarrollar un sistema de prestaciones, ayudas al alquiler y protección de colectivos vulnerables, como las ayudas a la emancipación juvenil, el seguimiento y la coordinación de las ayudas al alquiler del Gobierno Vasco o la promoción del acceso a la vivienda para colectivos preferentes.
Regular las zonas de vivienda tensionadas, con acciones para el control de precios de alquiler y extensión de condiciones de los contratos, un plan de incentivos de rehabilitación a grandes tenedores para la movilización de vivienda vacía o un protocolo de asistencia a Comunidades de Propietarios para la limitación de actividades turísticas.