Euskadi estudia el comportamiento energético de 2.000 viviendas sociales para impulsar el ahorro de energía en el parque público de vivienda

0
  • En el proyecto e-lagun participan el Departamento de Vivienda del Gobierno Vasco, AVS y las principales entidades sociales de vivienda de Euskadi: Alokabide, Donostiako Etxegintza, Sestao Berri y Viviendas Municipales de Bilbao
  • Se crea un servicio pionero de acompañamiento energético, que ayuda a las personas inquilinas a revisar todos los aspectos de su factura eléctrica y de calefacción o gas natural, y les asesora en hábitos de consumo más eficientes
  • En los primeros acompañamientos se ha identificado que tres de cada cuatro familias pagan entre 100 y 120 euros anuales más de lo que deberían

En la actualidad existen en Euskadi más de 25.000 viviendas de gestión pública destinadas al alquiler social. Este importante volumen de viviendas se encuentra repartido por todo el territorio y cuenta con características muy heterogéneas tanto desde el punto de vista arquitectónico, como de la antigüedad, accesibilidad o los suministros energéticos.

Es precisamente este último aspecto, el de los suministros y la eficiencia energética, el que está siendo objeto de un profundo estudio por parte de la Viceconsejería de Vivienda del Gobierno Vasco, la Asociación de Gestores Públicos de Vivienda y Suelo (AVS) y las principales entidades sociales de Vivienda de Euskadi (Alokabide, Donostiako Etxegintza, Sestao Berri y Viviendas Municipales de Bilbao), que de forma conjunta han puesto en marcha e-lagun. El objetivo de este proyecto piloto es conseguir un modelo de gestión integral de la energía en la vivienda pública de Euskadi, que garantice la optimización de los recursos existentes y el mayor confort para las personas inquilinas al menor coste posible.

El mix de suministro energético de una vivienda es el que permite cubrir toda su demanda en cuestiones como la iluminación, los electrodomésticos, la climatización o el agua caliente. Pero el mercado eléctrico es de tal complejidad que, en muchas ocasiones, los modelos contratados no se ajustan a las necesidades ni de los propietarios ni de los usuarios.

Este es el motivo por el que el Gobierno Vasco y las entidades de vivienda social están estudiando el comportamiento energético de casi 2.000 viviendas de su propiedad, agrupadas en 500 puntos de suministro de elementos comunes –de garajes, ascensores, luz de la escalera, etc.- y repartidas en 150 edificios ubicados en Barakaldo, Bilbao, Donostia, Sestao y Vitoria-Gasteiz. El mayor aporte lo realiza Alokabide, la sociedad pública dependiente del Departamento de Vivienda, con 1.000 viviendas, seguida de Viviendas Municipales de Bilbao, con 458 viviendas y 37 locales y de Donostiako Etxegintza y Sestao Berri, con 200 cada una. 

El análisis de los suministros comunes de los edificios públicos ha llegado ya a su ecuador, con 240 contratos analizados y ahorros anuales detectados por valor de 60.000 euros. En ellos, se han impulsado trámites para mejorar y optimizar los contratos y se ha mantenido la vigilancia posterior, para detectar desviaciones de consumo u otras posibles mejoras.

Asimismo, se ha puesto en marcha un servicio de acompañamiento para las familias que residen en las viviendas públicas, con la creación de la figura del “gestor energético”, que les ayuda a revisar todos los aspectos de su factura eléctrica y de calefacción o gas natural y les da a conocer la existencia de recursos como el bono social energético. También se realiza un perfil de comportamiento y se les entregan un manual con pautas de ahorro y eficiencia para adoptar hábitos de consumo más eficientes.

En las primeras actuaciones se ha detectado que 3 de cada 4 familias pagan más de lo que deberían. Lo hacen además con una media de entre 100 y 120 euros anuales. El acompañamiento se está iniciando ahora, y se ha impulsado ya con 180 viviendas de Bizkaia y Gipuzkoa, con las que se han dado pasos para mejorar sus contratos y adecuarlos a cada situación. En el caso de las viviendas recientemente adjudicadas, el 90% de las personas inquilinas -50 viviendas- han aceptado la intervención de los gestores energéticos, que son quienes se ponen en contacto con las familias para iniciar el proceso, para contratar los suministros y lograr precios ajustados en su factura.

Iniciativa pionera en el sector público

El acompañamiento energético impulsado por el Departamento de Vivienda, AVS y las principales entidades sociales de vivienda de Euskadi es una iniciativa pionera, ya que no existen a día de hoy en el sector público servicios de acompañamiento desde el principio hasta la tramitación final de los suministros energéticos.  Tiene un carácter gratuito y se pondrá a disposición de las personas usuarias del parque público de vivienda de alquiler con el objetivo de vigilar el impacto económico y medioambiental de la energía en las familias reduciendo al máximo el coste e impulsando el empoderamiento del usuario frente a todas las derivadas energéticas. También realiza, si así lo requiere el inquilino, labores de representación para la contratación de suministros, así como reclamaciones y adecuaciones en dichos contratos o gestión de ayudas vinculadas a la energía.

La iniciativa pretende, por una parte, conseguir el mayor confort posible para el usuario de una vivienda de alquiler social al menor coste energético y, por otra, que las sociedades propietarias puedan gestionar los contratos energéticos con una mayor eficacia y control.

En última instancia, el proyecto e-lagun estudia abrir la puerta en un futuro, tras analizar las repercusiones técnicas, operativas y legales que supone, a la posibilidad de incorporar la energía como un concepto más de la propia gestión en las promociones de alquiler público y asegurar, en su caso, el suministro de energía limpia y en las mejores condiciones de coste, mediante nuevos instrumentos públicos (gestor público de energía) o privados preexistentes o a estimular (gestores privados competitivos).