Artolazabal resalta que las actuaciones del fondo Covid hacia las personas sin hogar han supuesto una oportunidad para llegar a ellas

0
  • Casi 700 personas han iniciado un itinerario de inclusión personalizado a través de ‘Lehen Urratsa’
  • La consejera estima que en Euskadi “hemos tenido un eficaz muro de contención contra la desigualdad”

Vitoria-Gasteiz, 30/04/2021

La consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, ha indicado hoy en el Parlamento Vasco que el confinamiento decretado al inicio de la pandemia y la decisión del Gobierno de España de cerrar pensiones y hoteles dejaron en la calle a centenares de personas, pero que, aunque “la pandemia ha tenido un efecto evidente en el sinhogarismo”, “hemos tratado de convertirla en una oportunidad”.

La consejera de Igualdad ha respondido hoy a una interpelación parlamentaria formulada por Isabel González, de Elkarrekin Podemos, relativa al acceso de las personas sin hogar al ejercicio de sus derechos. Artolazabal ha puesto en valor el impacto positivo de los programas impulsados por el Fondo Covid Inor Atzean Utzi Gabe, en las personas sin hogar. Así, ha recordado que el confinamiento permitió identificar una a una, con nombres y apellidos, a las personas que se encontraban en situación de calle, ya que casi todas se encontraban atendidas en los dispositivos de Aterpeak. Además, finalizado el confinamiento, a todas las personas acogidas se les ofreció una alternativa habitacional, a través de Lehen Urratsa, y el acceso a una prestación para cubrir necesidades básicas a través de Azken Sarea Indartzen.

Casi 700 personas aceptaron la oportunidad que se les ofrecía y en estos momentos están siendo atendidas en el programa Lehen Urratsa, según ha indicado. “Estamos orgullosas de haber evitado que centenares de personas cayeran en la exclusión más extrema, volviendo a la calle”. Esta alternativa habitacional, vinculada a un proceso de acompañamiento, está permitiendo a las personas atendidas engancharse a un proceso más continuado con las entidades sociales. Y entidades sociales que antes atendían en calle, ahora pueden hacerlo en pensiones o albergues abriendo nuevas posibilidades de integración a las personas en situación de vulnerabilidad.

Beatriz Artolazabal, ha destacado igualmente la Estrategia Vasca para Personas Sin Hogar 2018-2021 como un instrumento adecuado para mejorar el sistema de atención al sinhogarismo “y no solo desde los servicios sociales”. Así, ha recordado que se trata de una estrategia integral, que aborda las distintas problemáticas que afectan a las personas en situación de exclusión residencial y que está orientada a la mejora de la calidad de los servicios que se prestan en alojamientos temporales y de acogida diurna y nocturna, así como de la intervención en medio abierto. Esta estrategia garantiza al mismo tiempo el adecuado desarrollo de la Cartera y el Mapa de Servicios Sociales. “Esta Estrategia y su desarrollo está más presente en nuestra actuación desde marzo del 2020”, ha argumentado.

Situación inédita

El 14 de marzo de 2020, con el confinamiento decretado al inicio de la pandemia, el Gobierno de Pedro Sánchez decidió cerrar pensiones y hoteles, dejando en la calle a centenares de personas. “Nos encontramos entonces ante una realidad crítica y que requería una atención de urgencia, que pudo ser organizada gracias a la experiencia y trabajo previo de colaboración que venimos realizando desde el Gobierno Vasco, junto con el resto de Administraciones Públicas y entidades del Tercer Sector Social”, ha señalado Artolazabal. La consejera ha estimado que la aportación de las entidades sociales que seguían estando en primera línea, “fue clave” para conocer la realidad que estaba emergiendo y que requería una respuesta. “En Euskadi hemos tenido un eficaz muro de contención contra la desigualdad”.

Beatriz Artolazabal ha explicado que, en el marco de la Mesa de Diálogo Civil, la viceconsejería de Políticas Sociales activó la comisión de exclusión con el objetivo de atender y colaborar con dichas entidades en la atención de todos los colectivos que quedaban en calle, sin recursos, en soledad y sin tener aseguradas sus necesidades básicas. Para ello contó con la colaboración de Ayuntamientos, Diputaciones Forales y otros departamentos del Gobierno Vasco, como Vivienda y Salud.

En este punto, la consejera ha detacado “los itinerarios exitosos que en estos meses están realizando decenas de jóvenes sin hogar, de mujeres en dificultades, de personas con enfermedades mentales y adicciones… etcétera”. Y ha subrayado la encomiable labor realizada entidades sociales como Bizitegi, Ellakuria, Peñascal, las Comisiones anti Sida (Bizkaisida y Sidalava), Zabalduz, Cáritas, Arrats, Erain, Fundación Gizakia, Agipad, Etorkintza, Fundación Jeiki y decenas de otras entidades sociales contra la exclusión social y el sinhogarismo.