El Gobierno local lleva al pleno, el próximo lunes 26 de enero, la aprobación definitiva del documento, tras el visto bueno, esta mañana, de la Comisión de Urbanismo.
El teniente de alcalde de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, Martín Fernández Prado, informó esta mañana del Plan Especial de Protección y Reforma Interior (PEPRI) de Casco Histórico, As Atochas, Pescadería y Orzán, que el Gobierno local llevará al pleno del próximo lunes, 26 de enero, para suaprobación definitiva, tras recibir el visto bueno en la Comisión de Urbanismo de esta mañana: «Será un día histórico porque se pone fin a una larga tramitación, a mucho trabajo, tanto del equipo redactor como de todas las administraciones que aportaron su granito de arena, y comienza una nueva etapa que vecinos, comerciantes y propietarios de la zona esperaban», subrayó Fernández Prado, a la vez que recordó que tan solo quedará ya pendiente la publicación en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) del documento para su entrada en vigor.
El teniente de alcalde ha mostrado su agradecimiento a todas las personas implicadas en la elaboración de este nuevo documento cuyo principal objetivo, junto con la defensa y conservación del patrimonio, siempre ha sido el de ser un documento abierto y sujeto a la mayor participación posible.
En este sentido, ha recordado que el trabajo entre Ayuntamiento y Xunta, especialmente de la Dirección Xeral de Patrimonio, ha sido de un «diálogo continuo» ya que ha habido reuniones periódicas para tratar de perfeccionar un plan en el que se han tenido en cuenta el 95% de las alegaciones recibidas, distintos informes sectoriales, así como los de los propios servicios de Urbanismo y de la Xunta: «Este exhaustivo y minucioso trabajo ha dado como resultado un instrumento actualizado, flexible, acorde al Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) vigente, participado y consensuado«, señaló e incidió en la relevancia que tiene para la ciudad el haber aprobado en un solo mandato dos herramientas tan importantes para la planificación de la ciudad del futuro como son el PGOM y el PEPRI.
«Tras 17 años en vigor, la pérdida patrimonial del 10% de los edificios catalogados (94) en la última década y laaprobación de un nuevo PGOM, la actualización del PEPRI era imprescindible«, aseguró Fernández Prado, quien destacó que con este nuevo documento se cumplen los objetivos marcados:
– Un instrumento actualizado. La revisión del PEPRI permite a la ciudad contar con un instrumento de trabajo más actualizado, que facilita el día a día del Ayuntamiento, de los profesionales e, incluso, de los vecinos. Permite contar con una ficha individual de cada edificio -hay alrededor de 1.700 en el ámbito- totalmente detallada que incluye, incluso, información arqueológica. Se ajusta, además, al nuevo PGOM, otro instrumento que apuesta por la rehabilitación.
– Un plan consensuado y transparente que refleja las demandas de los vecinos. La tramitación ha sido larga, pero ha permitido contar con una herramienta detallada que se ha ido perfeccionando con las aportaciones de las distintas administraciones implicadas y con las alegaciones de vecinos y colectivos -se recibieron 1.558-. En este sentido, ha habido casi una veintena de reuniones con asociaciones vecinales y colectivos; se publicó el documento en la web municipal; se formó un equipo que atendió personalmente a los interesados y se realizó una exposición divulgativa. «Sin duda el documento ha mejorado con las aportaciones de vecinos, colectivos y particulares», apuntó el concejal.
– Un nuevo modelo de ciudad que apuesta por la rehabilitación y por el cuidado del pasado. El nuevo PEPRI, junto con el PGOM, será la guía que permita abanderar un nuevo modelo de ciudad que apuesta por la rehabilitación y la mejora de la calidad urbana: «Apostando por una ciudad no de expansión, sino centrada en la mejora de los barrios». Un modelo que encaja con las iniciativas que el Gobierno local ha puesto en marcha en el mandato con el objetivo de cuidar el pasado: como el Plan de Murallas o la recuperación (tras negociaciones con otras administraciones) de edificios emblemáticos para dotarlos de actividad y contenido como el CIDEA, la Casa del Consulado, el Gobierno Militar o la Fábrica de Tabacos.
– Integración en la ciudad. Una herramienta cuya aplicación supondrá mejorar la calidad de todo el conjunto con todas las ventajas que ello supone tanto para los habitantes, que tendrán un espacio público cuidado y una mejora de calidad de vida y de estética de la zona, como para los comerciantes, ya que se prevé un impulso de la actividad económica y del turismo. El casco histórico deja de dar la espalda a la ciudad y al mar y se integra en el resto de A Coruña. El Gobierno local ya ha empezado a dar los primeros pasos con proyectos como el de peatonalización de la Ciudad Vieja o la instalación de ascensores en Capitán Troncoso y As Ánimas.
– Reactivación del uso residencial gracias a:
1) La garantía de que todos y cada uno de los edificios incluidos en el ámbito podrán optar a subvenciones, a la instalación de ascensores y a la rehabilitación de sus viviendas.
2) Se elimina el fuera de ordenación, para mayor tranquilidad de los vecinos y se asegura la vida útil de cada edificio.
3) Se apuesta por una modernización de infraestructuras, espacios públicos y servicios que mejorarán la calidad de vida y la percepción estética de la zona, no solo para los vecinos, sino para otros ciudadanos que comenzarán a ver esta zona como un lugar ideal para residir.
4) Flexibilidad. La zonificación del plan (teniendo en cuenta la identidad de cada zona y las completas fichas individuales de cada edificio) va a permitir estudiar caso por caso, en vez de aplicar de forma rigurosa y genérica la norma.
5) Seguir el programa de rehabilitación supondría intervenir en el 20% de los edificios y elevar la ocupación del parque edificado hasta el 88%.
– Reactivación económica:
1) A los profesionales del sector les permite tener un mayor conocimiento de los edificios de la zona. Además, se fomentan las políticas de rehabilitación, generando empleo en un sector castigado.
2) Regulación y flexibilidad en usos. Se apuesta por los usos exclusivos, permitiendo dedicar edificios a un uso comercial o de oficinas (especialmente, en la zona de Cantones o Pescadería). De esta forma, se pretende reactivar el corazón de negocios y financiero no solo de la ciudad, sino de la comarca y regional.
3) Toda la renovación estética, de edificios y de espacios públicos será un foco de atracción para vecinos y turistas, ayudando a la reactivación del comercio y hostelería.
4) Puesta en marcha del Distrito Creativo.
– Modernización: El objetivo es que los vecinos del ámbito, especialmente del casco histórico, disfruten de unosservicios, unas infraestructuras y una calidad de vida propia de cualquier habitante de una ciudad actual, pero conservando y respetando el patrimonio arquitectónico y artístico. Por eso, el PEPRI aporta algo más que una serie de normas, sugiere planes para infraestructuras o de espacios públicos: «Queremos que el centro histórico vuelva a ser el centro social, cultural, económico y de negocios del área», subrayó el concejal.
«Confiamos en que el PEPRI será la herramienta perfecta para combinar la protección y conservación de nuestro patrimonio con la regeneración económica y social de todo el ámbito para recuperar el lugar que merece y para tener un casco histórico a la altura de una ciudad que cuenta con un Patrimonio de la Humanidad como la Torre de Hércules«, finalizó Fernández Prado.