Destrozan el nido de la ánade azulona en la plaza Antonio María Labaien en Donostia

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PRUEBA

Nos hacemos eco de una nueva denuncia de Eguzki:

«Una habitual, como todos los años. Llevaba incubando en la isleta del estanque de la Plaza Antonio MarÍa Labaien (antes, Plaza Santa Catalina), un par de semanas. Los nacimientos estaban previstos para finales de marzo.

Ya no va a haber eclosiones, tampoco ilusión ni sonrisas de la gente que pasa por al lado. Los equipos de jardinería municipales, sin necesidad alguna, han quitado la vegetación de la isleta circular y han esparcido los huevos con los embriones dentro entre las flores fuera de la isleta. La gente se ha enfadado y les ha reprendido.

Esto no es la isla Santa Clara, donde llevan haciendo lo mismo durante años con los nidos de las aves marinas en la pradera superior, donde nadie les ve ni les recriminan nada. Tras la erradicación de la cubierta vegetal, han procedido a preparar la tala del abedul que preside la isleta. Va a ser el cuarto abedul que plantan ahí en pocos años. La estrategia consiste en plantar un abedul sano y esbelto para poco después someterle a una mutilación (no poda) descomunal y así, generarle una muerte lenta y segura. Esta premeditada intervención genera un trabajo extra e innecesario, con el consiguiente incremento del gasto, más dinero que se va por el sumidero.

Ahora, la ánade azulona junto a los dos machos, espera en las cercanías. Quiere regresar al nido pero ya no hay nido, ni huevos, ni agua en el estanque. La señora con un corazón gigante que tiene una rampa de madera en casa y que la coloca todos los años cuando nacen las crías, también estará triste. El próximo día 20 de marzo se celebrará el Día Mundial del gorrión, los mismos que todos los atardeceres acudían a dormir durante años al abedul sin podar ni mutilar del estanque circular, donde la lámina de agua les ofrecía protección. Ellos también han sido desalojados por todas estas malas prácticas.

Urge un cambio de actuación por parte del consistorio, abandonar las políticas de menosprecio a la vida silvestre y caminar hacia el respeto animal y de la biodiversidad, así como mejorar la comunicación sana y fluida entre sus administrados para avanzar hacia una sociedad mejor.»