Entre 2005 y 2014 han sido 238.129 ciudadanos los que han pasado por Madrid Emprende, el 68% de los cuales han acudido desde junio de 2011, un momento duro de la recesión.
La Red de Viveros de Empresas ha albergado en sus siete años de funcionamiento casi 350 empresas en despachos y cerca de 2.000 proyectos empresariales en espacios de trabajo compartidos.
Madrid Emprende, empresa municipal dedicada a impulsar y apoyar los nuevos negocios, la creación de riqueza y la generación de empleo cumple diez años. En este tiempo han sido miles los madrileños que se han convertido en emprendedores mientras que Madrid se convertía en una de las principales ciudades del mundo en número de incubadoras de empresas y centros de coworking.
«Hoy trabajar para uno mismo se ve como algo natural, una opción más que cualquier persona puede plantearse en algún momento de su vida. De hecho, son 100.000 los madrileños que han montado un negocio en los últimos tres años y medio, y otros 168.000 los que piensan montarlo próximamente», ha dicho la alcaldesa, Ana Botella, en el acto celebrado en el Vivero de Empresas de Carabanchel para conmemorar el aniversario, «una ocasión excelente para que nos demos cuenta de lo mucho que ha avanzado la cultura emprendedora en la ciudad de Madrid a lo largo de la década» y para comprobar el importante papel de Madrid Emprende en el combate contra los efectos de la recesión y acompañar la incipiente recuperación.
Pionero
El Ayuntamiento de Madrid fue pionero con Madrid Emprende, que arranca en 2005. Oír a una administración municipal hablar entonces de startups, incubadoras de empresas o ángeles inversores era todavía muy poco habitual.
Entre 2005 y 2014 han sido 238.129 ciudadanos los que han pasado por Madrid Emprende, el 68% de los cuales han acudido desde junio de 2011, un momento duro de la recesión. Por otra parte las 11.446 altas empresariales tramitadas, 1.437 actuaciones formativas, 834 eventos de contacto e intercambio de ideas, son algunos de los datos más elocuentes de la intensa actividad de Madrid Emprende en este tiempo. Sólo por los distintos cursos celebrados en los viveros de empresas han pasado más de 33.000 alumnos así como otros 22.200 participantes en las charlas de encuentro e inspiración.
También ha sido pionero el Ayuntamiento de Madrid en aplicar medidas fiscales que favorecen a los autónomos.»Hemos abierto líneas de trabajo que luego han continuado otras administraciones, como es la devolución del 50% de la cuota de autónomos, que se adelantó un año a la tarifa plana del Estado», aclaró la alcaldesa.
El emprendimiento es un fenómeno que se puede promover activamente desde las instituciones y, en este fenómeno y en la economía en general, las ciudades tienen un creciente protagonismo. Así lo ha señalado la alcaldesa, afirmando, a la par, que Madrid es una ciudad de emprendedores, como los datos indican.
Los pequeños empresarios representan más del 90% de los establecimientos de Madrid y, de éstos, el 70% tienen negocios con menos de 10 empleados. «Se trata, además, de un tejido empresarial relativamente joven», pues más de la mitad de las empresas instaladas en la ciudad se han constituido a partir del año 2000, según datos Estructura Económica de la Ciudad. «El hecho de que tengamos más de 100.000 emprendedores en nuestra ciudad -según Ana Botella- nos convierte en una de las mayores concentraciones de empresas nacientes de Europa, de acuerdo al Global Entrepreneurship Monitor (GEM)».
Proyecto estratégico
Botella declaró a Madrid Emprende «proyecto estratégico» para la ciudad. Recordó que cuando comenzó su actividad, en 2005, se estaban acometiendo grandes inversiones que han resultado fundamentales como la construcción de la T4, la extensión de la alta velocidad o la propia remodelación de la M-30 impulsada por el Ayuntamiento de Madrid. «Entonces costaba imaginarse que esa pequeña agencia de promoción empresarial, que nacía con un presupuesto muy exiguo, pudiera configurarse con el tiempo en una apuesta tan eficaz para el desarrollo económico de nuestra capital como la que representaban aquellas inversiones», reconoció .
«En el Ayuntamiento de Madrid pensamos que apoyar a los emprendedores no es gasto, sino inversión, pues los recursos que a este fin se destinan tienen la virtud de traer importantes retornos a futuro para la ciudad», declaró Botella.
Esta decisión se ha plasmado en la Red de Viveros de Empresas, una infraestructura que ha albergado en sus siete años de funcionamiento casi 350 empresas en despachos y cerca de 2.000 proyectos empresariales en espacios de trabajo compartidos.
Mientras estaban en los centros de la Red, esas 350 empresas han facturado cerca de 85,3 millones de euros entre 2008, año de apertura del primer vivero, y 2014, según datos del tercer trimestre. Cifra muy relevante, que triplica con creces los 24 millones de euros que supuso la construcción de estas infraestructuras.
Internacionalización
La alcaldesa se refirió al impulso a la industria y la internacionalización como vectores estratégicos. En esta dirección, y en relación con la industria, Madrid Emprende ha movilizado cerca de 89 millones de euros hacia las áreas de mayor concentración empresarial de la ciudad, destinando fondos a la rehabilitación de los polígonos industriales, a la mejora de sus comunicaciones y a la construcción de infraestructuras destinadas a albergar empresas servindustriales e innovadoras.
Por otro lado, la estrategia de internacionalización, que ha sido clave durante la crisis, ha pretendido desde el principio potenciar la imagen de Madrid como destino para la inversión extranjera y prestar asistencia a los empresarios foráneos que acuden a la ciudad a hacer negocios.
Una línea de actuación que en los últimos años ha extendido el campo de acción de Madrid Emprende a las startups extranjeras y a los organismos multilaterales.
A finales de 2011 entró en servicio el Madrid International Lab, un centro que no solo culminaba el gran proyecto de la Red de Viveros de Empresas de la Ciudad, sino que además suponía un salto cualitativo en la estrategia de internacionalización de Madrid. Un espacio que tiene por objeto atraer no solo inversión, sino también talento extranjero, así como servir de lanzadera para startups madrileñas con proyección exterior.
«Madrid International Lab es, sin duda, una incubadora única en nuestro país. Un espacio al que, tan solo unos meses después de inaugurarse, el Banco Interamericano de Desarrollo decidió trasladar su delegación para Europa, que hasta entonces estaba en París», ha señalado Ana Botella.
Tax Free
También ha sido decisiva la creación en septiembre de 2013 de Madrid Tax Free, un incentivo fiscal que devuelve, tanto a pymes de reciente creación como a comercios instalados en los mercados municipales, el 100% de una cesta de tributos locales. En apenas año y medio, Madrid Tax Free suma 1.625 empresas beneficiarias.
«Los buenos resultados nos han llevado a crear más espacios a disposición de los emprendedores de la ciudad. Al término de esta legislatura habrá el doble que al comienzo», según la alcaldesa..
En cuanto al fomento de la ciudad inteligente, la alcaldesa ha asegurado que la ciudadsmart también debe construirse de abajo arriba, aprovechando las soluciones que los ciudadanos más innovadores dan a problemas cotidianos. A ello se ha destinado uno de los nuevos centros que conforman la iniciativa 7+7, el Smart Lab, y un programa de aceleración con el mismo nombre en colaboración con Ferrovial.
La alcaldesa ha destacado que el nacimiento de Madrid Emprende coincidió con la pujanza del sector inmobiliario de grandes infraestructuras, lo cual hacía que apenas se «prestara atención» a los emprendedores como agentes de cambio y crecimiento económico. «Hoy este colectivo está muy presente en la agenda de las administraciones públicas, los medios y de la propia sociedad civil».
«Hace 10 años no había en la ciudad ningún espacio público o privado específicamente dirigido a los emprendedores. Hoy Madrid es una de las ciudades del mundo con mayor número de incubadoras y centros de coworking. A los 14 espacios de titularidad municipal, hay que añadir cerca de 200 oficinas compartidas impulsadas por el sector privado en nuestra capital.
«El resultado de todo ello es que Madrid ha despuntado como entorno favorable a las nuevas iniciativas empresariales». La ciudad se concentra el 13,5% de las empresas que se crean en España. Cifras que representan el valor de miles de empresarios que generan riqueza y empleo, y que explican por qué la capital de España tiene una tasa de paro 7,3 puntos por debajo de la media nacional, finalizó Ana Botella
