El número de viajeros que utilizan los medios de transporte de la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM) por razones laborales se ha incrementado en un 9,1% durante el primer trimestre de 2015. Los datos recogidos en la Encuesta de movilidad en días laborables indican que, si se tienen en cuenta datos de toda la semana, el incremento de pasajeros se da en casi todos los sistemas de transporte, especialmente el metro, que ha crecido un 1,9% durante el primer trimestre de 2015.
También ha aumentado el volumen de viajeros de FGC (1,6%), Cercanías (0,5%),TRAM (1,1%), autobuses AMB (0,8%), autobuses DGTM (0,6%) y autobuses urbanos (0,3%). Por el contrario, los autobuses de la red de TMB han reducido su pasaje en un 2,4%. En su conjunto, la red de transporte de la ATM ha transportado a 230,6 millones de viajeros durante los tres primeros meses del año, lo que equivale a un incremento del 0,6%.
Según datos de la ATM, a finales de 2011 se inició un descenso del número de usuarios, después de alcanzar un pico de casi 938 millones de pasajeros en los doce meses anteriores. Esta tendencia se repitió a mediados del año 2013, cuando cayó a un nivel mínimo por debajo de los 890 millones de pasajeros interanuales, y se inició una dinámica positiva que ha provocado que en marzo de 2015 se hayan alcanzado los 917 millones de viajeros en los últimos doce meses.
En cuanto a los tipos de títulos que utilizan los usuarios, ha habido un descenso en el uso de las tarjetas multiviaje integradas, especialmente de la T-50/30, aunque la reducción del precio de la T-10 ha permitido mantener al alza la demanda de este título, que ha crecido en un 8,6%. Por otro lado, se ha producido un aumento de un 11,46% en el uso de los abonos (T-Mes y T-Trimestre) y un incremento en el uso de los títulos sociales en un 10,45%. El consejero ha destacado que el 26% de los viajes del total de la red de la ATM tienen algún tipo de tarificación social.
El consejero de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila, ha apuntado que estos datos se pueden relacionar con la mejora de la economía catalana y la política tarifaria del Gobierno, que “premia el uso y la recurrencia”.
