Son datos de la Estadística de Procedimiento Concursal del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Las familias y empresas que se declararon en concurso de acreedores (suspensión de pagos y quiebras) ante la imposibilidad de afrontar sus pagos y deudas sumaron un total de 83 en Galicia en el segundo trimestre del año, lo que supone un retroceso del 37,1 % con respecto al mismo período del año anterior.
De abril a junio, las familias en concurso en Galicia fueron un total de ocho, mientras que las empresas que pusieron en marcha este procedimiento fueron 75. De ellas, 64 eran sociedades de responsabilidad limitada; seis eran sociedades anónimas; tres, personas físicas; y dos más se engloban en la categoría de ‘otros’.
En 78 casos de los 83 contabilizados los concursos fueron voluntarios, al tiempo que se registraron cinco necesarios. Por clase de procedimiento, 15 fueron abreviados y 68 ordinarios.
Atendiendo a la actividad económica de las empresas concursadas, el mayor número se corresponde con el sector de la construcción (22), seguida por el comercio al por mayor (11).
La estadística evidencia que más de la mitad de las empresas concursadas, un total de 43, tenía menos de cinco asalariados. En concreto, 10 compañías no tenían ningún empleado, 18 tenían uno o dos y 15 más tenían entre tres y cinco trabajadores. En lo que atañe a la antigüedad, fueron 18 las empresas concursadas que tenían 20 o más años, por 16 con entre nueve y 12 años de vigencia y 15 de entre 13 y 16 años.
Los datos del INE indican que el mayor número de empresas concursadas en el segundo trimestre de este año (38) tenían un volumen de negocio que no superaba los 0,25 millones de euros. Por detrás, 12 firmas oscilaban entre el medio millón y el millón de euros y otras siete facturaban entre 0,25 y 0,5 millones de euros.