La Alhóndiga de Segovia acoge la exposición «Antes del tiempo», los últimos trabajos de la artista madrileña Carlota Cuesta.
La muestra es el resultado de cinco años de trabajo e investigación, periodo en el que la artista ha conseguido un nuevo informalismo matérico que no deja de sorprender. Se trata de una serie de obras realizadas sobre madera a partir de arenas de playa y de montaña, y de otros materiales devueltos por el mar a la Costa da Morte, lugar de residencia de la artista junto con Madrid.
«Antes del tiempo» investiga sobre el origen del mundo y sus misterios, espacios metafísicos de mundos soñados o posibles que intentan mostrar lo irreal de lo presente. En esta serie, las obras de Carlota Cuesta representan señales de esos orígenes, restos de una arqueología imaginable, que no siempre es real. Así, se pueden ver yacimientos, fósiles, cuevas, ciudades enterradas, pero también momias no humanas de habitantes de otros mundos. O desiertos con dunas infinitas que una vez estuvieron bañados por el mar. Los materiales se conjugan acertadamente para mostrar las contradicciones del azar.
La exposición se podrá visitar de miércoles a viernes, de 18:00 a 21:00 horas, y los sábados, domingos y festivos, de 12:00 a 14:00 horas y de 18:00 a 22:00 horas. Lunes y martes permanece cerrada. El acceso es libre. Además, a un precio simbólico, se podrá adquirir un libro-catálogo de la muestra.
Carlota Cuesta realiza estudios de dibujo y pintura en el Museo de Reproducciones Artísticas, en la Escuela de Artes y Oficios, en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando, y en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. En su primera etapa (1.974-1978), muestra figuras de ancianos o atemporales, con rostros de ojos vacíos, que afloran del fondo de los mares entre algas, conchas y alevines.
En 1980 expone en el Museo Carrillo Gil México DF ‘Concierto sin tiempo’, y en 1981 en el Museo de las Artes A.C. de Monterrey, cuyo texto lo firma Dámaso Alonso en el único ensayo que realizó sobre pintura. En 1983 realiza una serie de cuadros junto con el pintor mexicano Alberto Gironella y la pintora española Jesusa Quirós, en Homenaje a Frida Khalo.
En 1984 es seleccionada para la muestra Mujeres en el Arte Español, 1900-1984, Centro Cultural Conde Duque, Madrid. Las series Metamorfosis y Mundo Clásico, algunos de cuyos cuadros se vieron en ARCO 85 y ARCO 87, son signo de su posterior evolución. La temática de alguno de estos cuadros se ve plenamente desarrollada en la exposición de dibujos de 1988 en la Casa del Siglo XV de Segovia, donde las formas son piedras, raíces y troncos retorcidos que el mar ha devuelto a la orilla. Naturaleza en transformación de estrías y cielos abrasados, anticipo a Los Volcanes que hará posteriormente.
En 1990 obtiene el primer premio Chaire Goya, Niza (Francia). En 1970, el premio Valdepeñas y en su primera exposición individual, en 1971, el premio Alcántara, Sala Goya de Madrid. En 1974 recibe el premio de Grabado en la I Bienal Internacional de Obra Gráfica, Segovia, y la Uva de Oro de la Exposición de Artes Plásticas de Valdepeñas.
En 1994 expone Cosas que son, y aquello que no es, cobra vida en el cuadro, con dominio del color. En 1994 aparecen, por primera vez, sus esculturas en madera pintada con planos intercambiados. Mundo inventado se expone en 1996, en la que se muestra por primera vez figuras de la serie ‘Lupus-lupi’, y aparece una aproximación a las formas de ángeles. La primera exposición de la serie ‘Los espacios’ se ve en Atlántica Centro de Arte de Coruña (1999).
La segunda parte de Memorias de la Memoria se expuso en Valladolid (2000). En los Guardianes de pared, verticales y de bolsillo, Carlota Cuesta ha logrado una simplificación hasta llegar a la síntesis máxima del Ángel hermético. Su última gran exposición ha sido Ciudades sumergidas, en el Palacio Isabel de Farnesio, de Aranjuez, (2007) siendo elegida mejor exposición del año por el Comité de Críticos de la Tertulia Ilustrada de Madrid. Es una serie de cuadros y esculturas en la que incorpora materiales recogidos en las playas de la Costa da Morte.