La historia del vibrador en ‘Sexo en Nueva York’, el conejo rampante, tomó relevancia gracias a la serie americana: este vibrador no solo batió todos los récords de venta en todo el mundo, sino que también hizo que dentro de las tiendas tuvieran una posición destacada.
La historia del vibrador de la serie Sexo en Nueva York, el conejo rampante, tiene su origen en Japón. Este vibrador fue sin duda un hito para la estimulación femenina de la mujer, porque los vibradores o consoladores que existían en la época eran para el fetiche masculino: tenían formas fálicas y no ofrecían una estimulación directa para la mujer.
En Japón los juguetes eróticos no tiene formas fálicas: los que reproducen la anatomía masculina son objetos de culto, por lo tanto no pueden ser utilizados para la estimulación o el placer sexual. Por eso, los juguetes eróticos vibradores tienen formas de animales, frutas, o plantas.
De echo hay marcas de vibradores que no utilizan formas realísticas en los vibradores: la ventaja de estos juguetes, como el conejo rampante, respecto a otros es que ofrecen 2 tipos de estimulación: la vaginal o punto G y la estimulación directa del clítoris. Esta novedad fue una revolución que, junto a la serie de sexo En Nueva York, revolucionó el mercado en el que se empezaban a producir gadgets que disponían de bolas o que rotaban: se empezaban a disponer de cientos de modelos, a cada cual mas innovador.
Esta dinámica se ha mantenido hasta hoy, con cientos de modelos y propuestas destacados en tiendas de vibradores, como Naturline Sex.