Dispondrán de un mes para declarar las variaciones producidas durante el último ejercicio, a fin de regularizar su situación tributaria
El Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz remitirá a partir del 8 de febrero un total de 2.162 cartas a empresas gasteiztarras notificándoles la necesidad de declarar las modificaciones que se hayan podido producir en la tributación del Impuesto de Actividades Económicas. A partir de entonces, quedará abierto un plazo de un mes para que remitan información sobre sus datos fiscales y cualquier variación en el ejercicio de las actividades que grava el IAE. Finalizado este plazo, el Ayuntamiento llevará a cabo a partir de abril una campaña de inspección específica in situ de las empresas para contrastar los datos aportados, llevar a cabo las correcciones oportunas y emitir las liquidaciones correspondientes.
El ámbito de la revisión fiscal será el de aquellas empresas cuya facturación supere los 2 millones de euros y las que, aun no superando actualmente esta cifra, hayan sido objeto de tributación por el IAE. Esta medida, que el Ayuntamiento aplicó por última vez en el año 2000, forma parte del Plan de Lucha contra el Fraude Fiscal emprendido por el Gabinete Urtaran.
«Cualquier impuesto debe ceñirse lo más posible a la realidad sobre la que se aplica y para ello, es fundamental utilizar las herramientas de que disponemos en la lucha contra el fraude fiscal. Queremos que las empresas paguen lo que les corresponda. Hace dieciséis años que no se lleva a cabo una revisión de la realidad fiscal del IAE a gran escala y ha llegado el momento de actuar en este sentido», ha señalado el alcalde de Vitoria-Gasteiz, Gorka Urtaran.
Dentro de la revisión de pagos del IAE, el Ayuntamiento remitirá inicialmente a cada empresa la información de que dispone sobre su actividad para calcular la cuota del impuesto. Para ello, se utilizan parámetros como la facturación económica, la potencia eléctrica instalada o la superficie de ejercicio de la actividad. Las empresas estarán obligadas a notificar modificaciones como el alta de nuevos establecimientos, el alta de nuevos epígrafes o la variación de elementos tributarios. Una vez recibidas las respuestas de los contribuyentes, se analizarán las declaraciones presentadas mediante visitas a las empresas, confirmando lo declarado o procediendo, en su caso, a iniciar el correspondiente procedimiento de regularización.