Recursos Humanos PRL: Se buscan profesionales de la seguridad y salud con talento y resilientes

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PRUEBA

Antonio Serrano Oliva, consultor HSE de la consultora de prevención de riesgos laborales PrevenControl, cree que los perfiles de los profesionales PRL que han de liderar la seguridad y salud en el siglo XXI han de tener talento y ser resilientes para gestionar y adaptarse a los nuevos entornos laborales.

Los responsables del área de Recursos Humanos o de la de Seguridad y Salud conocen qué tipo de tareas suelen realizar los técnicos de prevención. Puede que su empresa sea muy singular, lo que en materia de seguridad y salud significa que se aleja de la media y que ha construido una cultura de seguridad consistente, exigente y duradera. De modo que la selección de personal se basa en la adecuada alineación de objetivos, actitudes, valores y aptitudes entre los candidatos y la organización para que el efecto de la incorporación sea siempre positivo.

De todos es conocido que los gerentes de las organizaciones consideran la seguridad y salud laboral como un coste (como mucho, necesario), e incluso una imposición legal, del que resulta difícil obtener rentabilidad.

Pese a todo, sigue siendo necesaria la contratación de técnicos de PRL. Si consultamos ofertas de empleo para esta posición, encontramos que las organizaciones valoran principalmente la gestión de procesos como su principal función (evaluación de riesgos, formación, gestión de planes de autoprotección, gestión de reconocimientos médicos, entre otras).

Si analizamos los objetivos que se establecen para estos profesionales en las ofertas de empleo, se identifican fundamentalmente el asesorar a la empresa en materia de riesgos laborales y en el cumplimiento legal en materia de prevención. Así pues, el objetivo principal de las organizaciones es cumplir con la normativa.

Además, se suele requerir la titulación superior en PRL y capacidades comunes con otras profesiones como la experiencia en puesto similar, alta titulación en inglés o conocimientos ofimáticos. Pero también se valoran capacidades personales como la organización y planificación, orientación a resultados, flexibilidad, relaciones interpersonales o trabajo en equipo.

Pero si no sabemos qué tipo de profesiones y de riesgos nos depara el futuro, ¿qué perfiles deberán tener quienes deben liderar la seguridad y salud en el siglo XXI? Tenemos la certeza de que no serán idénticos a los actuales. Sabemos que hay una tendencia a automatizar procesos hasta el momento ejecutados por personas y que habrán sustancias con propiedades desconocidas.

El técnico de prevención del siglo XXI ha de tener apertura de mente, ser creativo y flexible para trabajar en entornos cambiantes. Si cada vez adquieren más importancia la ergonomía y la psicología, busquemos a alguien persuasivo, capaz de realizar informes específicos, de extraer conclusiones, de comunicarlas acertadamente, y de relacionarse bien con trabajadores, mandos intermedios y directores. Alguien que permita extender la cultura preventiva, seduciendo, atrayendo, construyendo un verdadero clima laboral maduro para la seguridad. Contratar un profesional resiliente, que se sobrepone a la adversidad de manera positiva y madura.

Más información en PrevenControl.