El próximo 1 de agosto, los usuarios de la nueva línea de alta capacidad podrán comprar, recargar y validar sus billetes sencillos de bus, y sus bonobuses en las máquinas expendedoras instaladas en las marquesinas, ya que a partir de la citada fecha, dicho servicio, que en las primeras semanas de implantación no ha supuesto coste para el usuario, dejará de ser gratuito.
La concejal de Movilidad y protección Ciudadana, Telesfora Ruiz, que ha visitado esta semana la parada de la LAC situada en Puerta Real, ha subrayado que al ofrecerse la compra y recarga a través de estos dispositivos instalados en las paradas, no sólo se agiliza el acceso al transporte público, sino que se ofrece una fórmula adicional y muy efectiva de pago, que se suma a la tradicional venta en kioscos.
En cuanto al funcionamiento de las máquinas expendedoras, Ruiz ha recordado que los cajeros muestran en un botón el resumen de tarifas que la máquina de autoventa es capaz de comercializar, para que el usuario elija entre las alternativas.
Así, de un lado, en el caso del billete ordinario, el usuario podrá comprar varios billetes en una misma operación hasta un máximo de 9 unidades. Si se pulsa el botón `Aceptar´, se pasa directamente al pago en efectivo, permitiendo la entrada de monedas como de billetes. La información de la ventana ofrecerá el precio, importe total de la venta, importe introducido, importe que resta por introducir caso de que faltara, y el cambio, cuando el usuario introduzca más dinero que el importe de la venta.
De otro lado, el dispositivo ofrece la posibilidad de comprar una tarjeta bonobús nueva, recargar credibús ya existente, añadir nuevos títulos a una tarjeta y ver los movimientos de la tarjeta; todo ello, en la ventana `Recarga y venta de bonobús».
También la edil ha reiterado la importancia de la validación de las tarjetas bonobús en las paradas de la LAC, una validación que también afecta a los transbordos, que serán gratuitos durante 60 segundos, ya sea de un vehículo LAC a un bus convencional; ya sea a la inversa.
La LAC entró en funcionamiento el pasado día 29 de junio y ha supuesto la mayor transformación del transporte público de las últimas décadas, con la incorporación de doce vehículos de 19,5 metros de longitud, que suprimirá a su vez la emisión de un 55 por ciento de emisiones de C02, que hasta ahora sufría el Centro de Granada.
