Hay muchas personas que piensan que participar en la enseñanza de niños pequeños no tiene que ser muy difícil, ya que no contestan, ni actúan como puede hacerlo un adolescente, pero este pensamiento es erróneo.
Paciencia, creatividad, responsabilidad, amabilidad….estas son algunas de las cualidades necesarias para trabajar con niños y sobre todo, si son pequeños. No todo el mundo vale para trabajar como educador infantil, existen una serie de cualidades que tiene que tener una persona para que su trabajo en un centro escolar con niños de corta edad sea eficaz.
• En primer lugar, es necesario que a la persona le gusten los niños, esto es algo imprescindible.
• La paciencia tiene que estar presente en todo momento. Los niños pequeños pueden tener actitudes que “nos saquen de quicio”, como llorar y gritar constantemente. Por este motivo, un educador infantil debe tener mucha paciencia.
• Tiene que comportarse como un modelo a seguir, los niños lo copian todo.
• Es necesario ser original y creativo. Los alumnos necesitan que las actividades les motiven para querer participar en ellas, hay que tener en cuenta que son niños y les gusta jugar.
• Responsabilidad y atención. Estas cualidades son tan importantes o más que las anteriores, un educador infantil esta a cargo de un número significativo de niños por lo que debe estar atento y darse cuenta de la responsabilidad que tiene.
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