Se trata de una intervención de limpieza, desbroce y saneamiento que promueve Toledo atendiendo a la necesidad de mantener en buen estado la zona industrial, ofreciendo una imagen digna de los espacios y reduciendo, además, el riesgo de incendio, al retirarse las malas hierbas y rastrojos secos.
Esta actuación se está llevando a cabo en el margen izquierdo (sentido Ocaña) de la N-400, en la denominada “zona de contacto” entre el Polígono industrial y residencial, afectando también a rincones de Río Jarama y las calles adyacentes a ambas vías.
Además de la limpieza y el mantenimiento, se van a realizar intervenciones y reparaciones de bordillos, aceras y pequeñas obras de albañilería, en una actuación global que se ha diseñado con la colaboración de la Asociación de Empresarios del Polígono.
El concejal de Empleo y Participación Ciudadana, Antonio Guijarro, ha explicado que esta intervención la están realizando doce trabajadores, dirigidos por un oficial, pertenecientes al Programa Extraordinario de Empleo que ha puesto en marcha el Ayuntamiento.
De esta forma, el Gobierno local atiende las necesidades de personas que se encontraban en situación de desempleo -y que no percibían ningún tipo de prestación- con su contratación durante tres meses en los que recibirán el salario mínimo interprofesional. Al mismo tiempo, la ciudad se beneficia de su labor, ya que llevan a cabo tareas en diferentes áreas municipales, en este caso para la mejora del entorno urbano.
El grupo que está trabajando en el Polígono comenzó esta actuación a mediados del mes de julio y hasta ahora ha recogido alrededor 2.000 bolsas en su labor de limpieza, que ha llegado ya a una superficie lineal de medio kilómetro.
