La Vespa Velutina, avispa asesina, se vio por primera vez hace dos años en Burela, municipio de a Mariña de Lugo y durante este tiempo se ha extendido por toda la comarca gallega sin que ninguno de los intentos por erradicarla haya logrado resultados.
El Occidente asturiano, otra zona gran productora de miel ha comenzado a ser invadido por este insecto que ataca a las abejas.
Después de descubrir avispas de esta especie invasora en San Tirso de Abres, concejo limítrofe con los mariñanos de Trabada y A Pontenova, se sabe de la existencia de nidos, aunque se cree que en menor número que en A Mariña, y la Asociación de Abeyeiros del Occidente astur ha confirmado los primeros ataques a colmenas del insecto invasor, ya extendido por A Mariña lucense.
El miedo a perder a gran parte de sus abejas y a sufrir una plaga como en la costa lucense ha llevado a los apicultores a empezar a instalar pequeñas trampas para cazar a la avispa, especie que lleva una década expandiéndose por Europa.
Las trampas consisten en botellas de plástico, agujereadas, y con agua y miel en el fondo. Atraen a la avispa, que una vez dentro no puede salir.
En la asociación de Abeyeiros del Occidente asturiano son conscientes de que no serán más que pequeños obstáculos para una plaga que, año tras año, irá a más. Por ese motivo han solicitado una reunión con responsables de la Consejería de Agroganadería del Principado para intentar buscar una solución.
