El pasado viernes, 19 de mayo, celebramos el Día Europeo del Mar, una jornada poco conocida pero muy especial ya que nos sirve para insistir en la concienciación del respeto por la vida marina y la limpieza de las aguas.
Brindamos por un mar limpio, un mar vivo!
¿Cómo lo celebramos?
En realidad tratamos de hacerlo cada día, en cada pequeño gesto. Y esto es lo que intentamos transmitir a nuestros pequeños invitados las diferentes asociaciones e instituciones que nos reunimos este día de mayo desde hace 4 años.
Explicamos a los 40 niños de 8 y 9 años de dos colegios donostiarras la importancia de la conservación de nuestros mares desde diferentes prismas, algo que depende de cada uno de nosotros. Todos somos responsables.
Los niños de los colegios Teresianas y San Patricio “ocuparon” el Museo Naval del puerto donostiarra y nos demostraron que vienen sobradamente preparados, contestando rápidamente a nuestras preguntas. Observadores y conocedores de la educación medioambiental en su entorno no dudaron en hablarnos de los plásticos abandonados en las playas o las medusas que se encuentran en verano.
Un mar vivo
Aitor y Soco Romano de Untzi Museoa, Iratxe Elso de Azti, Aitzol Burguete de Navegavela, Oihane Cabezas de Azti, Esther Origoyen y Xabier Lasaga del Aquarium de San Sebastián, Enara de Albaola y Marta de Olasagasti. Todos los que allí estábamos vivimos pensando en el mar, disfrutando de él, luchando por él, viviendo de él.
Cada uno desde su puesto tiene una misma preocupación: la salud del mar, aunar esfuerzos por mantener el mar vivo.
¿Cómo podemos transmitirlo a los niños?
Xabier, contándoles cómo salvaron a una tortuga que iba a morir enredada en una bolsa abandonada en el mar; Oihane, hablándoles de las basuras y de cómo el plástico se convierte en microplástico que el pez se come y acababa en nuestro estómago; Iratxe y Aitor, explicándoles lo que tarda en desaparecer en el mar cada uno de nuestros desperdicios.
Aitzol, enseñándoles el interior de un velero y la buena conducta que deben tener los navegantes; Marta, la importancia de una pesca sostenible y un consumo de pescado responsable: No siendo perezosos e informándonos sobre el método de pesca y el origen del pescado que compramos y comemos.
Proyecto Life Lema
Enara de Albaola, presentándoles el proyecto Life lema el cual ha permitido financiar la construcción de unos barquitos de madera elaborados por Albaola, con el apoyo de Azti. Los barcos se distribuyeron entre los niños para que los pintaran después de nuestra charla.
En cada una de sus salidas el velero Betiaitxe los irá lanzando, marcando las coordenadas y la dirección de viento, y comprobarán dónde recala cada barquito de madera ya que quien lo encuentre, podrías ser tú!, enviará un mail a Azti*. Así sabremos a dónde habría llegado la basura en caso de haberla tirado desde el velero.
* La información está grabada en cada barco. Este proyecto europeo en el que participan diferentes instituciones pretende concienciar a la sociedad del peligro de utilizar el mar como vertedero, teniendo como misión la recogida de 100 toneladas de basura en Gipuzkoa y Lapurdi durante tres años.
Hamaiketako marino
Marina Vallet de Montano de bodegas Hiruzta llegó con sus txakolís blanco y rosado desde Hondarribia, perfecto colofón para brindar por nuestro Mar Cantábrico alrededor del bonito del norte, anchoas del Cantábrico a la donostiarra y pimientitos rellenos de atún de Olasagastri. En cada brindis transmitíamos la emoción que sentimos trabajando en un medio que nos apasiona, que respetamos, que nos hace felices. Cada cual en una empresa muy diferente pero que juntos ya formamos una gran familia.
Por nuestro Cantábrico, por todos los océanos, por un mar vivo, siempre!
