Con su enfoque energético pueden conseguir ahorros hasta del 10% del consumo energético.
EDE Ingenieros ha cumplido 25 años de actividad dedicada a optimizar el uso de la energía en los procesos industriales. La firma vasca mide su trayectoria en las medidas de eficiencia que ha planteado en todo este tiempo. La suma total equivale a un ahorro de más 30 millones de Kwh/año de energía eléctrica y más 33 millones de KWh/año de gas natural. En su conjunto, si se hubieran llevado todas a cabo, implicaría más de 18 mil toneladas/año de CO2 evitadas.
La actividad de EDE Ingenieros ha evolucionado con los cambios del uso energético y la concienciación sobre su importancia. “La energía en la industria Pyme ha cambiado del departamento de administración al de dirección” afirma Mariano Sánchez, gerente de EDE Ingenieros. Acorde con estos cambios la firma ha dado respuesta a las necesidades de la pyme industrial con servicios orientados a la mejora en la gestión de la energía. Desde la realización de auditorías y planes estratégicos energéticos o la monitorización de consumos hasta la obtención de la certificación ISO 50001 o la implantación de un sistema de gestión energética. Sus profesionales han realizado más de 350 auditorías energéticas en el sector industrial y más 430 estudios.
Frente a la “actual vulgarización de las auditorías energéticas, con escaso contenido” su enfoque es abordar la energía como un aspecto integrado en la empresa que afecta a todos los departamentos para plantear estrategias a largo plazo acordes a las necesidades reales de los procesos. Es un ciclo de mejora continua que permite encauzar las posibles desviaciones, tener en cuenta las modificaciones y profundizar en el ahorro. Con estas premisas, llevando a cabo todas las medidas que se derivan de los distintos análisis, pueden conseguir ahorros hasta del 10% del consumo energético “en algún caso incluso más, aunque lo habitual es que no se lleven a cabo todas las medidas de ahorro en un primer momento.”
La recomendación de EDE Ingenieros para una adecuada gestión energética es analizar, medir, establecer repartos energéticos, y realizar seguimiento. Teniendo en cuenta estos cuatro puntos, se pueden implementar las medidas necesarias para optimizar los sistemas. También señalan que no hay que limitarse a realizar actuaciones de ahorro energético cuando hay un cambio de equipo. “Hay que aprovechar el cambio de líneas en las empresas para introducir el factor de ahorro energético desde la fase de diseño porque hay un coste evitado”. Otra de sus estrategias es asegurar la eficiencia de los equipos auxiliares omnipresentes en la industria como son los sistemas de aire comprimido. Estos sistemas son ineficientes y pueden representar un 20% o 30% de la energía total, “esto significa un ahorro importante en una empresa que consume mucho”.
En el ámbito de la ingeniería industrial EDE Ingenieros se ha especializado en realizar modificaciones de los sistemas de producción, incluyendo proyectos integrales de traslado de plantas completas. También en seguridad industrial, en la aplicación de los diferentes reglamentos en vigor: almacenamiento de productos químicos, baja tensión, equipos a presión, protección contra incendios, etc. Su equipo ha realizado más de 130 legalizaciones de proyectos industriales.
Entre los proyectos en curso, a nivel de ingeniería están desarrollando proyectos de instalaciones de electrolineras. A nivel de consultoría colaboran con varios grupos empresariales para implantar un sistema de gestión energética previo a la implantación definitiva de la Norma ISO 50001. Mirando al futuro, se orientan a la creación de nuevos productos energéticos acordes a la necesidad de descarbonizar la actividad industrial. Están trabajando en el aprovechamiento de las energías residuales para su utilización en los procesos productivos.
En el campo de la ingeniería industrial EDE Ingenieros se ha adentrado en las metodologías HAZOP de análisis de riesgos y prevén entrar en el Comisioning, para verificar el rendimiento de equipos en su puesta en marcha. “Nuestro punto fuerte es nuestra capacidad de adaptarnos y de involucrarnos en los procesos industriales para comprenderlos y atender a todas sus implicaciones” afirma Mariano Sánchez.