PRUEBA
Un joven de 23 años natural de Donostia y vecino del municipio navarro de Añézcar perdió la vida ayer tras ser atropellado en Berrioplano por un vehículo cuyo conductor dio positivo en el test de alcohol.
El trágico suceso ocurrió a las 07:14 horas a la altura del kilómetro 7 de la N-240 y en el mismo también resultó herido de pronóstico reservado el conductor del coche, que tuvo que ser trasladado al Complejo Hospitalario de Navarra.