Euskal Trenbide Sarea estudia rescindir el contrato del tramo Miraconcha-Easo de las obras de la variante del Topo debido al importante incremento del presupuesto derivado de las incidencias geológicas surgidas en la ejecución del proyecto.
En uno de los frentes de excavación, la discontinuidad del terreno provocó el pasado mes de junio la afluencia imprevista de aguas, lo que generó el descalce de un edificio en el paseo de La Concha. Para superar este contratiempo, se están aplicando inyecciones de lechada de mortero para consolidar el tereno.
Asimismo, la aparición de arenas a gran profundidad en la zona de Easo, obligó a la aplicación de un sistema constructivo conocido Jet Grouting, desde el pasado mes de enero. Se trata de una técnica de alta presión para tratamiento de suelos poco compactos, mezclándolo y sustituyéndolo por cemento. De esta forma se mejora la capacidad resistente del terreno.
La aplicación de los tratamientos para resolver estos problemas supone un sobrecoste presupuestario superior a lo que permite la ley de contratación, por lo que ETS estudia la posibilidad de rescindir el contrato actual. En aproximadamente dos meses se redactaría un nuevo proyecto constructivo, basado en un 95% en el actual pero que incluya las soluciones constructivas, que saldría a licitación antes de fin de año, con la idea de que el nuevo adjudicatario pueda reanudar las obras a pleno rendimiento hacia el mes de mayo.
En todo este tiempo, sin embargo, los trabajos no se van a paralizar. La actual UTE acometerá tareas para garantizar la seguridad, mientras que los trabajos en superficie se mantendrán con normalidad para evitar afecciones a la ciudadanía.
En la actualidad está ejecutado aproximadamente el 40% de la obra del tramo Miraconcha-Easo, de poco más de 2 kilómetros de longitud. En la caverna Easo se está procediendo a su revestimiento, al tiempo que se trabaja en la boca de Morlans, el cañón de Autonomía y la ejecución de micropilotes en la calle San Martin, para el futuro acceso por la calle Loiola.
En contra de lo ocurrido con el tramo 2, en el Lugaritz-Miraconcha, de 2.140 metros de longitud, la excavación ha dado rendimientos muy elevados y ya está completada. La caverna de Bentaberri está revestida, mientras que se está trabajando en la conexión con la línea en Lugaritz y los revestimientos del túnel y los cañones de acceso a la plaza Bentaberri y el polideportivo.
