Ayer domingo el equilibrista estadounidense Nick Wallenda ha batido dos réccords mundiales en el skyline de Chicago, caminando sobre un cable de acero a más de 60 pisos de altura.
Recorrió la distancia entre los edificios Marina West, de 180 metros de altura, y Leo Burnett de 204 metros. La caminata duró un poco menos de siete minutos y la pendiente entre los dos edificios equivalió a poco más de ocho pisos de altura.
En una noche protagonizada por el frío y el viento, miles de personas se reunieron en las márgenes del río Chicago para arropar junto a millones de televidentes de todo el mundo, a Wallenda.
Caminó primero en pendiente el equivalente a dos manzanas, con un ángulo de 19 grados entre los edificios Marina West, de 180 metros de altura, y Leo Burnett de 204 metros. Regresó a la azotea del Marina West y caminó 28 metros con los ojos vendados hasta la otra torre del mismo complejo.
No usó red o arnés de seguridad para cumplir su hazaña, desarrollada a 9 grados centígrados de temperatura y con vientos de 16 kilómetros por hora.
Wallenda declaró luego que pudo escuchar desde la altura el rugido y los aplausos de la multitud, cifrada en unas 50.000 personas, y bromeó al afirmar que estuvo tentado de detenerse y sacar su cámara para tomarse un retrato a 192 metros de altura sobre el río Chicago.
Ambas hazañas batieron récords mundiales por el ángulo de inclinación de la primera caminata y la altura de la caminata con los ojos vendados en el segundo recorrido.
